Todos los fans de Star Wars (y los no tanto) ya se han enamorado de BB8, el droide bola que hemos descubierto en el trailer de la nueva película Star Wars Episodio VII: El despertar de la fuerza, que se estrenará a finales de este año.
Con tan sólo una aparición de unos segundos en escena, BB 8 se ha convertido en la sensación de la red, con las consecuentes preguntas que ha suscitado: ¿Es un robot real? Y si es así ¿cómo funciona? ¿Es acaso una imagen generada por ordenador?, y la más repetida, ¿Puedo tener uno igual?
Paciencia joven padawan, tus preguntas tendrán una respuesta satisfactoria.
Podemos asegurar sin ninguna duda que el BB 8 es un robot muy real, tan real que fue presentado en sociedad ante una multitud de entusiastas fans en la convención de Star Wars en Anaheim, California celebrada hace unos meses.
El director de la película, JJ Abrams y la productora Kathleen Kennedy exhibieron un verdadero androide BB-8, por lo que sabemos que no es sólo una imagen digital, es algo tangible que podemos tocar.
Su diseño es algo que no habíamos visto nunca en un droide, un cuerpo con forma de orbe y una cabeza flotante encima, que no sólo no se cae, sino que además le permite a su cuerpo moverse libremente.
Por eso todo el mundo se quedo atónito ante su presencia. R2-D2 que estaba a su lado pasó a un segundo plano, y mientras el director explicaba todo el proceso de creación del robot BB 8, éste se paseaba por todo el escenario exhibiéndose.
Obviamente, no es lo mismo en un rodaje trabajar con una imagen digital que un robot de verdad. Una CGI indiscutiblemente sería mucho más sencilla y fácil, pero para los actores, para el rodaje, para el conjunto en general era mucho mejor construir un robot, aunque fuese sólo una marioneta dirigida.
Pero, ¿Cómo funciona? Podemos adivinar la mitad del robot, ya que el cerebro pensante que está detrás de todo esto es el equipo de Sphero (antes llamado Orbotix), el fabricante del robot esférico inteligente.
Cuando el equipo de ingenieros de Sphero se enteró de los planes de Disney de relanzar la famosa y productiva saga de La Guerra de las Galaxias, inmediatamente contactaron con el director, Abrams, que estaba buscando nuevas ideas tecnológicas y quien las plasmara. De esa unión surgió el BB-8, un robot autónomo con cabeza de cúpula
